Fue decorado con un vocabulario formal renacentista que rememora las formas decorativas del Palacio del Louvre.
Este salón, habilitado en el año 1927 por el Gobernador Benjamín Villafañe, atesora uno de los legados más significativos para los jujeños: la Bandera obsequiada por el General Manuel Belgrano al Cabildo de San Salvador de Jujuy después del triunfo en la batalla de Salta, en reconocimientos a los sacrificios realizados durante el memorable Éxodo de 1812 y las Guerras de la Independencia.
La Bandera, de 162 cm. por 148 cm., está confeccionada en tela de raso; consta de tres paños y lleva pintado el escudo que fuera aprobado por la Asamblea General Constituyente de 1813.
Este emblema fue conservado durante muchos años en distintos lugares, tales como el Cabildo, la Iglesia Matriz, la Honorable Legislatura y el despacho de Gobernadores, hasta el año de su inauguración en 1927, el cual fue especialmente realizado y dedicado para su veneración.
El Salón también conserva en su interior un Escudo Nacional de madera pintada, rodeado por una frase del profeta Isaías que dice “Venid que de gracia se os da el néctar agradable y el licor divino de la sabiduría”. (Fuente: Wikipedia)
El 25 de mayo de 1813, el general Manuel Belgrano donó la bandera celeste y blanca al Cabildo de Jujuy (cuyo edificio original fue demolido a principios del siglo XX), en homenaje al Éxodo Jujeño del 23 de agosto de 1812. Antes la había hecho bendecir en la Iglesia Matriz.
La retirada de los pobladores hacia Tucumán facilitó los triunfos del Ejército del Norte en Las Piedras, Tucumán y Salta. Por ese gesto, Belgrano designó a la capital jujeña «Abanderada de la Patria».
Ese día glorioso del 25 de Mayo de 1812, quedó registrado por la pluma del propio Gral. Belgrano, quien dice que tomando en sus manos la bandera arengó a la tropa diciendo:
«Soldados, el 25 de mayo será para siempre un día memorable en los anales de nuestra Historia y vosotros tendréis un motivo más para recordarlo, cuando, en él por primera vez, veis en mis manos la Bandera Nacional que ya os distingue de las demás naciones del globo,… Nos olvidéis jamás que vuestra obra es de Dios; que el os ha concedido esta Bandera y que nos manda que la sostengamos, … solo puedo decir que la Patria tiene hijos que sostendrán su causa y que primero perecerán que ver usurpados sus derechos».